EE.UU. afirma que Japón aún tiene trabajo por hacer en la lucha contra la trata de personas

EE.UU. afirma que Japón aún tiene trabajo por hacer en la lucha contra la trata de personas

El fracaso de Japón a la hora de investigar y procesar penalmente más casos de trabajo infantil y tráfico sexual ha llevado a Estados Unidos a dejarlo en segundo lugar en una escala de cuatro niveles publicada por el Departamento de Estado, según indicó el lunes su informe anual.

El informe de 2024 afirma que el gobierno japonés "no cumple plenamente los estándares mínimos para la eliminación de la trata, pero está realizando importantes esfuerzos para hacerlo", reconociendo que la situación ha mejorado ligeramente en comparación con el año anterior.

El informe destaca un proyecto de ley destinado a reducir las vulnerabilidades al trabajo forzoso en el marco del programa de pasantías técnicas de Japón, presentado por el gobierno al parlamento en marzo y aprobado a principios de este mes.

Sin embargo, añade, "los esfuerzos generales, en particular para prevenir la trata entre la población de trabajadores migrantes altamente vulnerable, siguen siendo insuficientes".

El programa de capacitación, introducido en 1993 como una forma de transferir habilidades de Japón a los países en desarrollo, ha sido criticado durante mucho tiempo como pretexto para importar mano de obra barata.

Desde el lanzamiento del programa, por ejemplo, muchos pasantes han huido debido a abusos como salarios impagos y acoso, ya que las estrictas reglas del programa les prohíben efectivamente cambiar de lugar de trabajo.

El informe también destaca las deficiencias de Japón en la lucha contra el tráfico sexual infantil.

“Las autoridades policiales siguieron identificando a cientos de niños explotados en la industria sexual sin verificar adecuadamente los indicadores de trata, lo que permitió que la mayoría de los traficantes sexuales de niños operaran con impunidad”, señala el informe.

El Informe sobre la Trata de Personas afirma que un total de 33 países y territorios, incluidos Australia, Bahréin, Finlandia, Filipinas, Singapur, Corea del Sur, Taiwán y los Estados Unidos, se encuentran en el Nivel 1, el nivel más alto del sistema de clasificación.

Además del Nivel 2, existe el nivel de Lista de Vigilancia de Nivel 2, que ubica a los países con un número significativo y creciente de personas afectadas por la trata.

Mientras tanto, países conocidos por sus pobres historiales en materia de derechos humanos, como China, Irán, Myanmar, Corea del Norte, Rusia y Siria, permanecieron en el Nivel 3, el más bajo.