El primer ministro japonés, Takaichi, acompañará a Trump a bordo del Marine One del presidente estadounidense.

El primer ministro japonés, Takaichi, acompañará a Trump a bordo del Marine One del presidente estadounidense.

WASHINGTON — La primera ministra japonesa, Sanae Takaichi, probablemente se unirá al presidente Donald Trump a bordo del Marine One para una visita a una base militar estadounidense cerca de Tokio, dijo el viernes una fuente de la Casa Blanca, en un movimiento poco común que subraya la fortaleza de la alianza bilateral.

Después de su primera cumbre cara a cara el martes en Tokio, se espera que Trump y Takaichi inspeccionen el portaaviones de propulsión nuclear George Washington, desplegado en la base de la Marina estadounidense en Yokosuka, dijo la fuente.

El gobierno de Estados Unidos se ha puesto en contacto con Japón para hablar de un vuelo conjunto en helicóptero desde un helipuerto militar estadounidense en Tokio a la base de Yokosuka en la vecina prefectura de Kanagawa, dijo la fuente.

La visita de Trump a Japón forma parte de una gira diplomática por Asia que también lo llevará a Malasia y Corea del Sur, donde se prevén reuniones multilaterales. Se espera que se reúna con el presidente chino, Xi Jinping, en Corea del Sur en medio de la intensificación de las tensiones comerciales.

En su primer discurso político ante el parlamento, Takaichi, quien se convirtió en la primera mujer primera ministra de Japón a principios de esta semana, dijo el viernes que quería construir una relación de confianza a través de la cumbre planeada con Trump, expresando su determinación de elevar la alianza bilateral a nuevas alturas.

El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, dijo a una cadena de televisión estadounidense que Trump y Takaichi tendrían una "muy buena relación", y la calificó de "protegida" del fallecido ex primer ministro Shinzo Abe, quien era "muy cercano" a Trump.

En febrero de 2017, Abe acompañó a Trump a bordo del Marine One desde la Casa Blanca a una base aérea cerca de Washington, antes de volar juntos a bordo del Air Force One a Florida, en lo que se consideró una bienvenida inusualmente cálida.