La línea Dentoshi reanuda sus operaciones normales a partir del primer tren el 7 de octubre
La línea Dentoshi, un importante ferrocarril de cercanías que sirve a la prefectura de Tokio y a Kanagawa, reanudó sus operaciones normales el 7 de octubre después de que el servicio se suspendiera el día anterior debido a una colisión y un descarrilamiento.
Tokyo Railways anunció el 7 de octubre que se cancelaron un total de 1.107 servicios de trenes en la línea Dentoshi y la línea Oimachi, que opera a través de servicios con la línea Dentoshi, lo que afectó a aproximadamente 652.000 pasajeros.
Tras el accidente ocurrido a última hora del 5 de octubre, la línea Dentoshi suspendió las operaciones del primer tren del 6 de octubre entre las estaciones de Saginuma y Shibuya hasta aproximadamente la medianoche.
El 7 de octubre, la línea Dentoshi y la línea Oimachi funcionaron en sus horarios habituales desde los primeros trenes del día, sin que se reportaran problemas en ninguna estación, dijo Tokyu Railways.
Según Ferrocarriles de Tokio y el Ministerio de Transporte, el accidente ocurrió en la estación de Kajigaya en Kawasaki, prefectura de Kanagawa, a las 23:04 del 5 de octubre.
Un tren local de pasajeros de 10 vagones que viajaba de la estación Chuo-Rinkan a la estación Shibuya colisionó con otro tren de 10 vagones fuera de servicio que se había detenido en la vía. El accidente ocurrió cuando el tren local de pasajeros se disponía a entrar en el andén de entrada de la estación Kajigaya.
No se reportaron heridos entre los 149 pasajeros del tren local y los cinco conductores y revisores a bordo de los dos trenes.
La Junta de Seguridad del Transporte de Japón envió investigadores a los accidentes ferroviarios del 6 de octubre.
Tras el accidente, los trenes de la línea DeNentoshi estaban operando entre las estaciones Saginuma y Chuo-Rinkan, mientras que los trenes de la línea Oimachi estaban operando entre las estaciones Oimachi y Futako-Tamagawa durante una inspección de seguridad el 6 de octubre.
Los trenes de la línea DeNentoshi están equipados con un sistema de control automático de trenes (ATC), que regula constantemente la velocidad del tren mediante el frenado automático para evitar colisiones.
Sin embargo, se cree que el sistema no se activó antes del accidente. Ferrocarriles de Tokio está investigando la causa de la falla, entre otros factores.

